viernes, 26 de marzo de 2010

Patetismos del opuesto

Otro de los ámbitos en que las mujeres son poco comprendidas por los nosotros, es en el de la ropa. Casi siempre ocupan el 80 (por no decir el 90) por ciento del placard. Esto quiere decir que tienen mucha, muchísima más ropa que nosotros, pero a la hora de tener que salir, ¡JÁ! NUN-CA saben qué ponerse.
Por lo visto no es fácil, a lo mejor tienen una idea mas o menos de lo que se quieren poner, pero a la hora de calzarse el equipete que tenían en mente, empiezan a aparecer las quichicientas variables que no esperaban. La temperatura, la humedad, el humor y sus hormonas.
El problema aparece en ese preciso instante, en el que (pobres) se dan cuenta de que no les gusta como les queda eso que tenian pensado que iban a usar. Y bueno, ahí empiezan a sacar cuanta pilcha tienen en el ropero. Muchos de nosotros no entendemos cómo (sigo sin encontrar adjetivos) mierda puede ser que nada les guste si esa misma ropa la usan en otras mil ocasiones sin chistar. Lo que pasa, creo, es que la mente femenina no funciona de manera resolutiva. Si así fuera, se pondrían siempre lo mismo. Y se ahorrarían muchos dolores de cabeza.. y NOS ahorraríamos, también, muchos dolores de huevo.

Ella: ¿Y? ¿Cómo me queda este jean?
Yo: (AY NO, por favor que no empiece otra vez) ¡Bien!
Ella: Si.. pero la verdad que no estoy cómoda, me siento y se me asoma el flotador.. Parada me gusta.. pero sentada, no. Me voy a probar otra cosa.
Yo: Ok.
Ella: ¿Y este chiripá?
Yo: Bien, también.
Ella: Ufa. No me convence, aparte, me parece que para ir allá, aunque sea en un bar, no da ir en ojotas.
Yo: ¿Por qué no?
Ella: Porque no.
Yo: Y bueno, no sé, ponete zapatillas.
Ella: Pero esto no queda bien con zapatillas.
Yo: (Uh, Dios.) No sé entonces
Ella: Me voy a probar otra cosa..
...
Ella: ¿Y esto? ¿Esto como me queda?
Yo: Te queda bien, también.
Ella: Ah bueno, ¿Todo me queda bien? ¿No puede haber algo que te guste más que otra cosa?
Yo: ¡No! Aparte, cuando te digo que algo me gusta más que otra cosa, terminás poniéndote lo que querés, osea, termino opinando al pedo.
Ella: ¡No es al pedo! Yo tomo en cuenta tu opinión, pero después.. me pongo lo que me resulta más cómodo.
Yo: Y bueno, ponete lo que te quede más cómodo. =)
Ella: ¡No funciona así! ¿Y si me pruebo un vestido? ¿Qué decís?
Yo: ¡Cualquiera de las opciones anteriores te quedaban bien!
Ella: ¿Qué quiere decir eso? ¿Que los vestidos me quedan mal?
Yo: No, pero cuando te digo que algo no me gusta cómo te queda, te ofendés.
Ella: ¡Mentira!
Yo: Ya pasamos por esto mil veces, basta, todo te queda bien, de verdad. Aparte, no es ropa nueva. Ya la usaste, ya sabés qué te queda cómodo, y qué no ¿Sabés? Preferiría mil veces que me hagas cambiar de ropa a mí a tener que pasar por esto. Dale, decime que no me pega la remera con el pantalón y me cambio.
Ella: No entendés nada.

1 comentario:

Sofía Pía. dijo...

Jajajajaja, es genial el nombre de la entrada.
Y si, escribis bien :? esta hace mil y recien lo ves -.-